Con el mismo sentimiento
de ayer, un poco cambiado tal vez, nada es igual, lo sabes y lo sé.
Intentamos dejar de ser lo que éramos para convertirnos en uno.
Hoy lo que soy es por ti.
Intentamos dejar de ser lo que éramos para convertirnos en uno.
Hoy lo que soy es por ti.
Tengo tanto para
contarte, tanto para decirte, tanto de lo que no estabas, ¿hace cuanto
tiempo no estás aquí?, tanto tiempo me dejaste ir.
Tanto me dejaste sola, tanto llore, tanto me levante, un poco reí pero bueno aquí estoy frente a ti.
Tanto me dejaste sola, tanto llore, tanto me levante, un poco reí pero bueno aquí estoy frente a ti.
Me tomó mucho buscar un
comienzo porque ahora eres “mío”, puedo saborear cada letra en el vibrar de mis
labios y sentir el fluir en el viento, esto es diferente y me gusta pensar que
es eterno, me gusta carcajear con los sueños y sentir el placer de tu recuerdo
vivo, ahora VIVO en mi ser.
Tengo miedo ¿y tú? Tantas
veces hemos fallecido y revivido, el cuerpo se desgasta las ganas se pierden ¿y
mis latidos? Sí, son más lentos… pero laten, laten por ti, por tú sonrisa, por
tu tiempo, por tus ganas de vivir siempre en mí, porque los momentos sean
eternos.
Y sí, me aferro a ese vivir, anhelando congelar el tiempo y rezando para que no te vuelvas por completo un recuerdo.
Y sí, me aferro a ese vivir, anhelando congelar el tiempo y rezando para que no te vuelvas por completo un recuerdo.
El frío se apodera de mis
sentidos, los vuelve necios, tercos y en contra de ti, inicio una guerra para
no correr a tus brazos y salgo perdiendo… eres el imán de mi alma, yo no valgo
nada si tú no existes, yo solo soy una más del mundo mientras tú eres todo del
mío.
Las lagrimas no son ya
nada, voy agarrando costumbre, es mi forma de amarte, una forma extraña, quizás
sin sentido ni porque, nunca lo entenderías, pero lo hago.
Son años te lo recuerdo, son años.
No es el mismo amar, se transformo con el tiempo, se volvió más resentido más egoísta, más de todos aquellos sinónimos sufrientes, eres solo “mío”, siempre lo fuiste y siempre lo serás.
Son años te lo recuerdo, son años.
No es el mismo amar, se transformo con el tiempo, se volvió más resentido más egoísta, más de todos aquellos sinónimos sufrientes, eres solo “mío”, siempre lo fuiste y siempre lo serás.
Soy consumida por el
maldito silencio, por tus partidas constantes, por tus promesas rotas, por tus
sonrisas y esa manía de hacer como si nada pasara.
Tus ojos marrones oscuros me tienen en un vaivén de emociones, queriéndome convertir en lo que eres pero no, yo no quiero lastimarte.
Tus ojos marrones oscuros me tienen en un vaivén de emociones, queriéndome convertir en lo que eres pero no, yo no quiero lastimarte.
Extraño, me gusta pensarte
así pero es la vida la que nos cambia, alguna vez fui como tú, así me
enamoraste tan pequeña, tan ingenua, me amaste como verdaderamente soy y yo a
ti.
Tanto me ha golpeado la vida, ¿dónde estabas? Eras mi héroe, tú todo lo podías, éramos infinitos, pero en mi mente de hoy eres mi adicción.
Últimamente ando viviendo del tobillo de tu lado oscuro pero rechazo fácilmente tu lado despectivo.
Tanto me ha golpeado la vida, ¿dónde estabas? Eras mi héroe, tú todo lo podías, éramos infinitos, pero en mi mente de hoy eres mi adicción.
Últimamente ando viviendo del tobillo de tu lado oscuro pero rechazo fácilmente tu lado despectivo.
El fin es a tú lado, no me
importa nada sí tu presencia no está latente en mí, no hay tiempo, no hay
distancia, no hay dolor, no hay nada.
Solo tú y yo en un mundo para dos.
Solo tú y yo en un mundo para dos.